Cdmx Press.- Ciudad de México a 19 de Septiembre 2019. El Dia de hoy el presidente Andrés Manuel López Obrador izó a media asta la bandera de México en recuerdo de las víctimas de los sismos que azotaron México en 1985 y 2017..
En 1985, cerca de las 7:30 am la tierra se estremeció con un terremoto de 8.1 grados. El saldo extraoficial habla de casi 40,000 víctimas.
Justo cuando se cumplían 32 años del temblor del 85, otro movimiento pasada la 1 pm tiempo de México, estremeció la CDMX con fuerza 7.1 y puso a prueba la resistencia y la unidad de la población.
El 19 de septiembre de 2017, un terremoto de magnitud 7,1 y con epicentro entre Puebla y Morelos (centro del país), dejó 369 muertos, 228 de ellos en Ciudad de México.
Días antes, el 7 de septiembre de 2017, un sismo de magnitud 8,2 con epicentro en el sureño estado de Chiapas había causado 98 víctimas mortales.
El estruendoso movimiento dejó edificios caídos y 369 fallecidos. No sólo sacudió la zona centrosur de México, también el sentir de sus pobladores. Sabían que pudieron ser ellos; que reaccionar un segundo más tarde o un movimiento distinto hubieran marcado la diferencia entre la vida y la muerte.
Tras la nube de polvo que terminaba de dispersarse, se pudo ver la catástrofe. No hubo diferencia de clase social ni edad. En un instante los mexicanos se dividieron en dos: los que estaban bajo los escombros y quienes no. Sus rostros expresaban un sentimiento: miedo. Su cuerpo reaccionaba de la misma forma: ayudando al necesitado.
Las vialidades eran irreconocibles
Medellín, Viaducto, Gabriel Mancera son algunas de las vialidades que Luis recorrió cámara en mano. En esta última una escena lo marcó: un grupo de gente sacando a alguien de entre los escombros. No supo si la persona estaba con vida o no y no quiso averiguarlo. Capturó una imagen que decidió guardar en su archivo personal y no publicarla.
“SABÍA QUE HABÍA GENTE AHÍ, SABÍA QUE SE ESTABA LUCHANDO POR VIDAS, SABÍA QUE LOS MINUTOS CORRÍAN Y ERAN SUPERIMPORTANTES, PERO FUE LA PRIMERA IMAGEN QUE YO TOMÉ DEL RESCATE DE UN CUERPO”, REMEMORA TRAS CASI UN AÑO DE QUE OCURRIÓ EL TERREMOTO.
Esa fotografía fue una de las más de 500 instantáneas que tomó durante las casi 12 horas de recorrido por las calles de una devastada Ciudad de México, pero cuyos habitantes se mostraron con más fuerza que nunca. La CDMX cayó, pero sus ciudadanos no.
“AL FINAL DEL DÍA SOY FOTÓGRAFO Y ME DEDICO A HACER UNA DOCUMENTACIÓN DE SUCESOS, LLÁMESE PUBLICITARIO O, EN ESTE CASO, DE UNA DESGRACIA, FUE MUY COMPLICADO PARA MÍ. NUNCA EN LA VIDA HABÍA SENTIDO QUE ALGO QUE ME APASIONA TANTO ME PUSIERA TAN TRISTE”, ASEGURA AL RECORDAR CON NOSTALGIA ESA JORNADA.
“CREO QUE EL 19 DE SEPTIEMBRE FUE AMOR. POCO A POCO SE NOS FUE ACABANDO, PERO EN ESE MOMENTO FUE UN AMOR DESMEDIDO POR TODOS”, REFLEXIONA.