Una nueva medida del Gobierno federal promete cambiar la forma en que los mexicanos pagan el peaje en carretera: un TAG oficial, sin contratos con empresas privadas, ni recargas mínimas obligatorias.
La presidenta Claudia Sheinbaum anunció este nuevo sistema durante su conferencia matutina del 10 de julio, como parte de su estrategia para mejorar la movilidad carretera y reducir la dependencia del efectivo. “No se trata de hacer negocio ni de afectar al automovilista. Se trata de facilitarle la vida a la gente”, afirmó.
Actualmente, los TAG IAVE operan bajo contratos con firmas privadas, lo que ha generado críticas por exigir montos mínimos de recarga y tener disponibilidad limitada. En contraste, el nuevo TAG público será accesible, sin condiciones restrictivas, y estará respaldado por recursos del Estado.
Este nuevo dispositivo busca beneficiar especialmente a quienes más enfrentan barreras para acceder a medios electrónicos de pago, agilizando además los tiempos de espera en casetas, que en temporadas vacacionales pueden alcanzar hasta 90 minutos.
Inspirado en la tarjeta de movilidad integrada usada en la capital del país, el TAG gubernamental podrá usarse sin trámites engorrosos y permitirá una experiencia vial más eficiente y equitativa. Aunque su fecha de implementación aún no está definida, la mandataria aseguró que su desarrollo ya está en marcha.
