Ciudad de México. Luego de que el miércoles pasado la Suprema Corte de Justicia de la Nación confirmó la suspensión de la operación de la granja porcícola en áreas de la reserva geohidrológica Anillo de los Cenotes, en Yucatán, personal del gobierno del estado realizó un operativo el sábado para clausurar los paradores turísticos de los defensores del agua más conocidos de Homún.
En un comunicado el grupo Indignación, que asesora a las comunidades, consideró que se trata de un “claro acto de represalia”. Recordó que la corte resolvió a favor de un amparo promovido por niños de la comunidad de Homún en contra de la operación de una granja industrial para la producción de 49 mil cerdos de la empresa Producción Alimentaria Porcícola con el fin de proteger el derecho a la salud, al medio ambiente y a una vida digna de los niños del pueblo maya de Homún.
“El gobierno panista del estado responde con la represalia en contra de quienes han llevado por la vía pacífica la defensa de sus cenotes ante la imposición de una fábrica de cochinos en el municipio de Homún, otorgando permisos corruptos”, señaló Indignación.
Recordó que hace dos años, en una mesa de diálogo con la empresa, representantes de ésta dijeron que si querían mandarían cerrar los cenotes, y lo cumplió ya que el 21 de septiembre de 2018, mientras el pueblo de Homún clausuraba simbólicamente la fábrica, personal de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente apoyado de la policía estatal, puso sellos de clausura en los cenotes de los 5 miembros de la coordinación de Kanan Ts’ono’ot.
El sábado fueron clausurados nuevamente los paradores turísticos de algunos integrantes de la directiva de esta coordinación, “nos preocupa que pudiera derivar en la criminalización contra defensoras y defensores del medio ambiente y los derechos de los pueblos”.
“Kanan Ts’ono’ot e Indignación expresamos nuestra intención de continuar esta dura, injusta y desigual lucha, si estos actos tuvieron la intención de amedrentarnos y de deslegitimarnos, les avisamos que no nos intimidan”.
Los menores que promovieron el amparo argumentan que la granja se construía con permisos irregulares, que no se consultó a la comunidad del municipio y que su funcionamiento causará graves afectaciones al medio ambiente.
En la región se encuentra 14.2 por ciento de las granjas identificadas en el territorio nacional (257); sólo 18 tienen manifestación de impacto ambiental. Se estima que cada año se sacrifican 1.8 millones de cerdos, lo que equivale a llenar el estadio Azteca 21 veces, indicaron.
La Península de Yucatán alberga cuatro sitios protegidos por la Convención de Ramsar, un tratado internacional que protege humedales como Laguna de Términos, la reserva geohidrológica Anillo de Cenotes, el parque estatal Laguna de Yalahau y la reserva de la biosfera Ría Celestún.
Fuente: La Jornada