Por Alex Villegas…
La declaración del ciudadano presidente en el sentido de que el de Ayotzinapa no es un crimen de estado, sin duda inquieta a más de un ciudadano, al grado de descontrolarlo, sobre todo a aquellos que durante años enfocaron la atención en la actuación de las fuerzas armadas o el gobierno federal, además de criticar la denominada verdad histórica.
Y se paso, constituye una bocanada de aire para funcionarios y responsables de las investigaciones efectuadas durante la pasada administración federal.
Pero, sin embargo, los más inquietos, por el señalamiento del ciudadano presidente vertido en tierras guerrerenses son los familiares y compañeros de los 43 normalistas desaparecidos.
En apariencia todo lo que se vino construyendo, en el pasado reciente en torno a la realización de nuevas pesquisas que arrojen luz sobre lo sucedido aquella trágica noche de septiembre, se viene abajo.
Sin embargo, al reiterar el compromiso de su administración de que para esclarecer la desaparición de los normalistas se entreguen recompensas y se otorgue protección a quienes aporten información para conocer el paradero de los estudiantes, el ciudadano presidente revive el tema, con un enfoque incierto.
No es la primera ocasión en que se hace ese ofrecimiento, sin que hasta el momento esa acción haya rendido los resultados esperados.
En el fondo, las declaraciones del ciudadano presidente, representan un descontrol para los interesados en el tema, porque ubican la acción en el plano del crimen organizado, o cualquier otro al que haya podido referirse.
Mujeres
La eliminación de la violencia contra las mujeres, evidentemente, es un anhelo generalizado ajeno a cualquier filia política, pero que sin duda avanza lentamente en lo que hace a la consecución del propósito.
La creación en el pasado el Conavim y la emisión de alerta de género en diversas entidades del país, como sucedió en el pasado reciente en el Ciudad de México, son un reflejo de la preocupación social, pero sobretodo de las acciones que desde el sector gubernamental se impulsan para avanzar en la consecución de la erradicación de esa problemática social.
De hecho, ese es un rubro en el que la 4T no ha podido actuar con las acciones demoledoras del pasado, que le han caracterizado a la fecha, como lo pone de manifiesto la presentación de avances realizada desde Palacio Nacional.