Durante la sesión, diputadas y diputados de Morena, PAN, PRI, PT, MC, Encuentro Social y PRD se manifestaron en contra de la violencia de género y feminicidios que sufren las mujeres mexicanas y guardaron un minuto de silencio por la muerte de la niña Fátima Cecilia Aldrighetti Antón.
Al referirse al acuerdo suscrito por la Junta de Coordinación Política, que rechaza y condena todo tipo de violencia en contra de mujeres y niñas, la diputada María Guadalupe Almaguer Pardo (PRD) sostuvo que México es un Estado feminicida y que la violación a los derechos humanos es una constante en lo público y en lo privado, conductas que llevan a la impunidad.
La diputada Ana Patricia Peralta De La Peña (Morena) preguntó: “qué más es necesario que pase para aceptar que la violencia contra las mujeres es una epidemia”. Afirmó que no hay lugar en México donde las mujeres “nos sentamos seguras, ni siquiera después de muertas se nos trata con dignidad”. Estimó que hoy más que nunca el Estado debe mandar un mensaje claro de “cero tolerancia”.
De Encuentro Social, la diputada Olga Patricia Sosa Ruiz enfatizó que “México está viviendo una grave crisis de violencia feminicida”. Resaltó que matar a una mujer cumpliendo al menos una de las siete causales “es feminicidio y los feminicidios son el grado más extremo de las violencias”. Consideró que urgentemente se deben diseñar, implantar y promover acciones efectivas e inmediatas para detener estos terribles hechos.
La diputada Martha Tagle Martínez (MC) destacó: “lo que demandamos son acciones urgentes para acabar con esta violencia que está matando al día a 10 mujeres”. Planteó reunirse con el secretario de Seguridad y Participación Ciudadana para saber qué hará y convocar también a un encuentro con los fiscales de todo el país a fin de saber qué medidas emergentes van a emprender para investigar los feminicidios.
Del PT, la legisladora Claudia Angélica Domínguez Vázquez afirmó que el fondo del problema es la descomposición social que por décadas se instaló, por lo que “tenemos que trabajar para regenerar la vida pública. Si queremos terminar con la violencia debemos educar a los hijos, tenemos que cuidar lo que miran en Internet. Tenemos que trabajar junto con maestros, maestras y padres de familia para dejar una mejor niñez que viva en total plenitud para su desarrollo”.
La diputada Laura Barrera Fortoul (PRI) preguntó cuántas muertes más tiene que haber para gritar ¡basta! y aceptar que esto no es de colores, partidos y culpas, es de responsabilidades y políticas públicas en protección de la niñez. “A dónde se dirige México, en qué momento la autoridad decidió que la popularidad vale más que garantizar una vida libre de violencia. El caso de Fátima exige no ser una cifra más, clama a la unidad nacional y pide a las autoridades responder con altura”.
Del PAN, la legisladora Martha Elena García Gómez exigió resultados, seguridad, justicia y respeto para las víctimas. Consideró necesario priorizar a la niñez, de conformidad con el marco constitucional y realizar acciones que protejan sus derechos. “La violencia contra las mujeres se resuelve con prevención, justicia y acción contundente del Estado. Tenemos que resolver y dar respuesta a la sociedad”.
Wendy Briceño Zuloaga, diputada de Morena, dijo que la defensa de mujeres y niñas debe ser un compromiso serio sin sesgos, ni mezquindades políticas y partidistas, y los protocolos de atención requieren ser reconocidos por todos los integrantes de las instituciones. Mencionó que las y los gobernadores han sido omisos, por lo que los llamó a pronunciarse y digan qué están haciendo por erradicar esta violencia, “porque si una voz falta en esta discusión es la de ellos. No le vamos a conceder el placer al sistema patriarcal de erosionar nuestro entramado social a costa de la vida de las mujeres, aquí nadie se rinde, ¡ni una más!”.