Durante la conferencia mañanera y algo parecido a un acto de campaña, Alfonso Durazo, titular de la SSPyPC, se despidió del gabinete luego de que el presidente destacara la labor del funcionario y lo destapara para la gubernatura de Sonora.
En sus últimas palabras al frente de seguridad, comentó que “se recibió un país con olor a pólvora y se ha ido avanzando.”
Sin embargo, en otras cifras de organizaciones civiles, lejos de reducirse los actos de violencia, en México la misma ha crecido a niveles históricos en lo que va del sexenio actual.
Con una cifra tan redonda como negra: más de 60 mil personas asesinadas en lo que va de su gestión, es la despedida de Alfonso Durazo.
Los homicidios se han vuelto uno de los mayores quebraderos de cabeza del gobierno de López Obrador. Aunque la incidencia de varios delitos ha disminuido este año, como los robos en distintas modalidades y el secuestro, la violencia ha mantenido su tendencia al alza, incluidos los asesinatos de mujeres. De 2018 a 2019, los homicidios dolosos crecieron 2.7 por ciento, según datos oficiales.
Mientras tanto, Durazo durante la presentación de resultados mensuales en materia de seguridad, destacó una reducción mínima en la mayoría de delitos, menos en feminicidios donde incrementó, pero omitió dar explicaciones.
Durante el informe sobre las cifras de seguridad, Alfonso Durazo declaró que, si bien hay una baja generalizada en la incidencia delictiva, hubo un aumento 29.4% de los delitos vinculados con la delincuencia organizada entre enero y septiembre de este año con relación al mismo período de 2019.