CIUDAD DE MÉXICO, 24 de febrero de 2021.- El caso de Chen Xialang, me recuerda al caso Faaroq Muhammad, de Pakistán, quien al arribar a México y llegar al control de pasaportes se encontró con que los oficiales del Instituto Nacional de Migración le impedían el paso. Fue incomunicado y enviado a una estancia temporal, donde debía aguardar hasta que se decretara su expulsión. Faaroq Muhammad estuvo retenido 41 días, de forma arbitraria, en la Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México .
Este comportamiento arbitrario, donde se les priva de la libertad en las estaciones migratorias; en donde incluso los migrantes deben de pagarse su propio alimento, es preocupante.
Así el caso de Chen Xiaolang, un ciudadano chino retenido por las autoridades de migración en México. Chen no habla más que chino mandarín. Anteriormente lo habían deportado las autoridades mexicanas al negarse a pagar diez mil dólares por ingresar al país; a pesar de que tenía papeles en regla, visa, pasaporte, y una carta del consulado de China.
No obstante, por una invitación de inversionistas chinos radicados en México, Chen Xiaolang regresó a México, el 17 de febrero de 2021, proveniente de la ciudad de Tokyo, Japón en el vuelo NH180 de la aerolínea Nippon Airways. Alrededor de las 14:05 horas fue detenido sin motivo en las instalaciones del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México por elementos del Instituto Nacional de Migración, quienes hasta el moment lo mantienen incomunicado sin motivo alguno.
Incluso el abogado que promovió el juicio de amparo ante la negativa de ingreso al país y la posible deportación Chen Xiaolang, no puede comunicarse con él. El amparo fue radicado en el Juzgado Décimo Tercero de Distrito de Amparo en Materia Administrativa en la Ciudad de México bajo el número de expediente 121/2021, mesa I.
El Actuario adscrito al juzgado mencionado notificó al quejoso y a la autoridad responsable la suspensión de plano del acto reclamado; siendo el caso que a la fecha Chen Xiaolang permanece incomunicado. El abogado defensor del ciudadano chino ha intentado por diversos medios entrevistarse con Xiaolang directamente en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México. El resultado ha sido infructuoso. El propio personal de Instituto Nacional de Migración, adscrito al aeropuerto, ha manifestado que no es posible tener comunicación con Chen Xiaolang , ya que se encuentra en un área restringida. Sin embargo, eso no debe ser motivo para privar de su libertad a una persona y mucho menos mantenerlo incomunicado.
No es la primera vez que personal de migración se comporta de forma arbitraria. Hace unos días, al excanciller Jorge Castañeda le retuvieron su pasaporte en el AICM, cuando arribaba de Nueva York, sin mayor explicación. Si eso le ocurre a un exsecretario de Estado por parte de las autoridades de migración, quienes son el primer contacto con un visitante en México, imaginen lo que le sucede a un ciudadano de otro país.