De 2006 a la fecha 46 personas defensoras de derechos humanos fueron asesinadas y distintas regiones del país representan un peligro para ellas, declaró la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH).
La Comisión detalló que desde el año 2006 han sido asesinadas 46 personas defensoras de derechos humanos, de las cuales 16 eran mujeres, y 5 personas más permanecen desaparecidas desde 2009, lo que demanda la atención e implementación de políticas públicas para prevenir, investigar y sancionar la violencia contra esas y esos activistas.
Las entidades con mayor número de homicidios de personas defensoras son Chihuahua, 14; Guerrero, 6; Oaxaca, 6; Veracruz, 3 y Sinaloa,2.
Esta información la presentó la CNDH en San Cristóbal de las Casas, Chiapas, durante el inicio de la campaña “Para que un día no tengamos que ser defensor@s de derechos humanos”.
La Comisión destacó la importancia de proteger y no criminalizar ni estigmatizar a las personas defensoras de derechos humanos, cuyo trabajo sustituye en muchos sentidos las obligaciones que originalmente corresponden al Estado.
La CNDH explicó que la protección de los activistas deriva de las agresiones, crímenes y abusos en su contra, tales como homicidios, intimidación, amenazas, campañas de desprestigio, iniciación de acciones judiciales y controles administrativos, entre otros.
Indicó que en esas agresiones pueden estar involucrados servidores públicos de todos los niveles de gobierno, así como personas que actúan en su nombre, con el objetivo de silenciar o debilitar sus denuncias para que los autores de violaciones a derechos humanos queden impunes.