Cancun Quintana Roo a 16 de noviembre 2020 Cdmx Press
Carlos Manuel Joaquín González, el que supuestamente es uno de los «Gobernadores mejor calificados», ha perdido el control total del Estado, dejando ver que la realidad es que ni está capacitado, ni está calificado, y se ha convertido en el principal enemigo de la ciudadanía, de las manifestaciones y de la prensa real.
Como se recordará, el gobernador de Quintana Roo, Carlos Manuel Joaquín González, y el ahora exsecretario de Seguridad Pública, Jesús Alberto Capella Ibarra, son responsables de la represión ejercida por parte de policías municipales en contra de una manifestación feminista, el 9 de noviembre en Cancún, como lo han asegurado integrantes de organizaciones civiles.
“La Comisión Interamericana de Derechos Humanos establece que el uso de la fuerza debe ajustarse a estrictos principios de excepcionalidad, necesidad, progresividad y proporcionalidad. En virtud de ellos, el uso de armas de fuego con municiones letales casi nunca se encuentran justificados, en el contexto de manifestaciones, por lo que se recomienda que la portación por parte de los agentes de seguridad sea restringida”
“Durante las protestas, los policías deben regular su actuación bajo el principio de protección de los derechos de quienes se manifiestan y de terceros: el uso de la fuerza debe ser siempre la última opción”
Haciendo un recuento de lo sucedido en Quintana Roo.
Las protestas en Quintana Roo, no son solo por los feminicidios.
“Estamos pasando la peor película de terror, ya no hablemos de robos, de extorsiones, ya todos los días aparece gente asesinada, cortada, mutilada. Es inadmisible”, dice Abelardo Vara, presidente honorario de la Asociación de Hoteles de Cancún.
Aunado a estos hechos de violencia por parte del crimen organizado, la represión policial empaña aún más a este destino turístico.
Disparos, gritos y personas aterradas huyendo de la policía en una plaza pública.
El primer hecho ocurrió el lunes, 9 de noviembre, en la ciudad de Cancún en donde cientos de manifestantes —la mayoría mujeres—, quienes protestaban ante el edificio del ayuntamiento por un caso de feminicidio, a unos kilómetros de la lujosa zona hotelera, fueron reprimidos y perseguidos a balazos por policías locales.
Un segundo acontecimiento se suscitó el día viernes 13 de noviembre en la ciudad de Chetumal cuando un grupo de ciudadanos de diferentes municipios, acudieron a manifestarse fuera del Congreso del Estado y del Palacio de gobierno.
Como se recordará el Congreso de Quintana Roo suspendió la sesión programada para ese día.
La situación no termino ahí, ya que, al concluir la manifestación, un grupo de agentes que nunca se identificaron y que se encontraban en una camioneta blanca sin placas, y portando armas largas, presuntamente trataron de ejecutar al Empresario Carlos Mimenza Novelo.
Nuevamente el Gobierno de Quintana Roo, actuando fuera de la ley y violentando una vez más el estado de Derecho y la libertad de expresión, envió a reprimir e intimidar a la ciudadanía.
Lo más hilarante de la situación es que el mismo gobierno abrió carpetas de investigación, por los daños a un vehículo “oficial” y por agresiones a los elementos policíacos.
En estos hechos apareció al rescate uno de los elementos corruptos de seguridad pública, acusado en cierto momento de desviar recursos públicos, Didier Vázquez.
Lamentablemente este solo fue otro episodio de terror en el Estado de Quintana Roo por que las represiones y agresiones continuaron el día domingo 15 de noviembre.
Cientos de manifestantes acudieron a la convocaría de la marcha, que incluyó, además de pintas en monumentos y daños a edificios públicos como el Palacio Municipal y la Fiscalía General del Estado, (FGE), en Cancún.
A las 14:00 horas fue la convocatoria en Malecón Tajamar, desde donde casi de inmediato avanzaron sobre la avenida Bonampak, y doblaron sobre la avenida Tulum, rumbo al palacio municipal.
Posteriormente se trasladaron a las oficinas de la FGE, en donde provocaron otro pequeño incendio, golpes para abrir las puertas, y petardos que aventaron a las instalaciones.
Se presume que estos hechos han sido provocados por personas infiltradas por el gobierno de Quintana Roo para desprestigiar el movimiento de manifestaciones pacíficas y desaparecer expedientes.
En el lugar de los hechos se encontraban presentes diversos medios de comunicación, mismos que fueron agredidos por elementos policíacos.
El Gobernador ha tratado de salirse como siempre por la tangente, argumentando en que los manifestantes son pagados, y que vienen de otros estados el hecho de que se mencionen a granaderos en la manifestación, no es una prueba que demuestre que las personas que actúan en esa manifestación son de otros estados, se le olvida que el Estado de Quintana Roo esta conformado por una población pluricultural y flotante
Carlos Joaquin no entiende que ya no solo es una manifestación feminista, se trata por todos los actos de corrupción, e impunidad, los cobros de piso, los secuestros y las extorsiones que no ha sido capas de controlar.