El rector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Enrique Graue, advirtió que vienen semanas muy difíciles, por lo que pidió acatar las medidas pertinentes para controlar la epidemia COVID-19, que ha causado en México 332 fallecidos y 5 mil 14 casos positivos.
“Ayer cumplimos tres semanas desde que acordamos el paro presencial de nuestras actividades académicas y culturales. En algunos de nuestros planteles el inicio del distanciamiento social alcanza ya casi cuatro semanas”, recordó el rector.
Insistió que durante este periodo, la UNAM ha hecho lo que le corresponde, ha puesto el conocimiento y su inteligencia colectiva al servicio de México.
Graue explicó que investigadores de la máxima casa de estudios trabajan en la implementación de la prueba para la detección del virus SARS-CoV2 y forman a otros académicos para ampliar sus capacidades de diagnóstico; otros más se esfuerzan para detectar el coronavirus entre la población universitaria.
El rector detalló que se han elaborado medios de transporte para las muestras biológicas del virus, los cuales han sido entregados a distintas instituciones del sector salud; se ha llevado a cabo un censo de capacidades de infraestructura, y se han enfocado esfuerzos al diseño de insumos y ventiladores.
La comunidad académica de la UNAM ha explorado las consecuencias que el aislamiento está en la sociedad y aquellas que irremediablemente se manifestarán cuando la emergencia haya sido levantada. Asimismo, los académicos se han enfocado a conocer y prever los efectos que dicho aislamiento acarreará en el medio ambiente o en la salud mental de las personas.
“Hemos conjuntado esfuerzos y capacidades con otras universidades para hacer propuestas, desde el punto de vista académico, ante la crisis económica y social que enfrentamos y se han generado distintos modelos matemáticos que permiten predecir, hasta donde es posible, el comportamiento de las curvas de infección de esta pandemia”, concluyó Graue.