El tema de la salud ambiental ha sido olvidado por décadas y hoy se debe retomar con acciones en favor de la salud pública y del planeta, declaró el secretario de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), Víctor Manuel Toledo Manzur.
Durante la Reunión de Alto Nivel “Vivir en un Mundo Químico”, que expertos en la materia sostuvieron para trabajar de manera coordinada en el desarrollo de iniciativas orientadas a proteger la salud de la población y preservar los ecosistemas, el secretario aceptó que en el país no existe una política medioambiental.
La materia de salud ambiental es complicada, “con tremenda contaminación del aire, cielo y agua, con sus consecuencias negativas en la salud humana”.
Durante la inauguración, encabezada por el secretario de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), Víctor Manuel Toledo Manzur; el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell Ramírez, con la representación del titular de Salud, Jorge Alcocer Varela, y la directora general del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), María Elena Álvarez-Buylla, se resaltó la necesidad de articular las capacidades de las diferentes instituciones públicas y ponerlas al servicio de la sociedad, para revertir los daños y prevenir futuros impactos que pueden ser irreversibles.
Por su parte, el subsecretario Hugo López- Gatell Ramírez destacó que “actualmente no se tienen programas, no hay articulación con las distintas entidades de la administración pública federal involucradas en este tema. Hoy tenemos la oportunidad de actuar generosamente, de vincularnos de manera eficiente y con una visión amplia en favor del bienestar de la población”.
María Elena Álvarez Buylla, directora general del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), alertó que en los cultivos transgénicos se emplean agrotóxicos nocivos para la salud.
Mencionó el caso del glifosato, considerado un agente teratógeno y cancerígeno, presente en una tercera parte de las tortillas de maíz que se consumen en México.
Planteó que los problemas de salud son un reflejo de los desequilibrios ambientales profundos que enfrentan México y el mundo.
También exhortó a separar las políticas científicas y tecnológicas de los intereses corporativos y lamentó que, en administraciones pasadas, se haya ocultado a la población la información y las evidencias científicas sobre los efectos nocivos de los tóxicos en la salud humana y el ambiente.
Expuso que a través de varios Programas Nacionales Estratégicos (ProNacEs), sobre Desarrollo Industrial y Toxicidades, Cuencas de Agua y Salud Ambiental, el Conacyt articulará capacidades interinstitucionales y multisectoriales para reducir en México la exposición a agentes tóxicos.
En su exposición, Juan Rivera Dommarco, director general del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP), destacó la importancia de que el Gobierno de México pueda implementar una política nacional de protección a la salud y a los ecosistemas, para mitigar los efectos de la contaminación en la población, incluyendo las consecuencias nocivas que produce la exposición y el consumo de sustancias tóxicas presentes en los alimentos por la utilización de plaguicidas o aditivos.
Por su parte, el representante de la Organización Panamericana de la Salud/Organización Mundial de la Salud (OPS/OMS) en México, Cristian Roberto Morales Fuhrimann, señaló que 35 por ciento de la carga mundial de mortalidad está ligada a factores ambientales, en especial a las sustancias químicas.
Precisó que este organismo internacional apoyará a México para que logre una política pública ambiental que integre las mejores estrategias, que le permitan alcanzar los objetivos del desarrollo sostenible en esta materia.