Los observadores electorales de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) acusaron el jueves al presidente estadounidense Donald Trump de “flagrante abuso de poder” por haber pedido la interrupción del recuento de votos antes del fin del proceso.
“Lo que es verdaderamente perturbador, es que el jefe de Estado norteamericano haya pedido el fin del recuento desde la Casa Blanca, es decir, con todos los símbolos del poder a su alrededor, debido a su supuesta victoria. Fue un flagrante abuso de poder”, dijo el diputado alemán Michael Georg Link, coordinador de la misión de observación internacional, en una entrevista con el diario alemán Stuttgarter Zeitung.
El diputado reiteró que las “acusaciones de manipulación de Trump no tienen fundamento”.
El mandatario acusa a los demócratas de “robar” las elecciones por depositar sufragios después del fin de las votaciones.
“Nuestros colegas están en el lugar y pueden confirmar que los observadores electorales de los diferentes campos políticos fueron admitidos y que el voto por correo sigue contabilizándose correctamente”, dijo Link.
Según el diputado hay “un tratamiento extraordinariamente profesional del flujo de voto por correo”.
La OSCE teme las consecuencias a largo plazo en la opinión pública estadounidense de la incertidumbre y las dudas que han impregnado este proceso electoral y alerta sobre un riesgo de radicalización.
La OSCE, formada por 57 países, entre ellos Estados Unidos, Rusia, Turquía y todos los Estados europeos, es uno de los pocos foros de diálogo entre Occidente y los expaíses soviéticos. Realiza misiones internacionales de observación de procesos electorales y ha estado a cargo de una misión sobre el conflicto en Ucrania.