REACTIVACIÓN SE DESACELERÓ EN EL CUARTO TRIMESTRE
El turismo foráneo y la producción de servicios turísticos muestran un mejor ritmo de mejora frente al gasto doméstico y la manufactura de bienes relacionados; en el último cuarto del año pasado el producto sectorial creció 7.7% desestacionalizado respecto del trimestre previo.
La pandemia del Covid-19 ocasionó una caída histórica del 28.4% en el PIB Turístico de México durante el 2020, la cual fue 3.5 veces la que presentó el PIB nacional (8.1%), de acuerdo con cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Este jueves, el instituto reportó que en el cuarto trimestre del 2020, con cifras desestacionalizadas, el PIB Turístico presentó un incremento del 7.7% respecto al trimestre previo (cuando se incrementó el 26.9% en relación a igual periodo anterior), y en su variación anual se mantuvo en signos negativos al reducirse el 26.9 por ciento.
Dicho comportamiento fue impulsado por un aumento trimestral del 8.9% en el rubro de servicios y una caída anual del 27.6%, mientras que los bienes crecieron el 2% respecto al trimestre previo y cayeron el 23.4% respecto al cuarto trimestre del 2019.
Para el director de Brain Analytics, Ariel Juárez, la desaceleración de fin de año es consecuencia del endurecimiento de los semáforos epidemiológicos establecidos por el gobierno federal ante el repunte de contagios, lo cual ocurrió justo al inicio de la temporada vacacional de diciembre del 2020.
“Finalmente, aunque moderado, se mantiene un crecimiento en los indicadores y esas son buenas señales para el sector turístico, el cual ya ha comenzado a mostrar en los últimos dos meses los beneficios de los procesos de vacunación, principalmente en Estados Unidos, el mercado emisor de turistas más relevante para México”, agregó el analista.
El segundo trimestre del año pasado fue el más complicado con un desplome del 47.1% en su comparación anual, como consecuencia de la implementación de la jornada nacional de sana distancia, que paralizó la actividad. Únicamente se podían realizar algunas actividades esenciales para disminuir contagios.
A partir del periodo julio-septiembre inició el repunte de la actividad, que cerró el año con un menor ritmo de crecimiento.
Mayor consumo receptivo
Respecto al consumo turístico interior, el crecimiento fue del 10.1%, en relación con el trimestre previo y su caída anual fue del 27.3 por ciento.
Al referirse a los Indicadores Trimestrales de la Actividad Turística (ITAT), reportados por el INEGI, el secretario de Turismo, Miguel Torruco, destacó en su cuenta de Twitter: por componentes, el consumo turístico interno presentó un aumento del 8.9% y el consumo turístico receptivo con un sobresaliente crecimiento de 34.6 por ciento.
Lo anterior, principalmente fue resultado de que los turistas de Estados Unidos siguieron mostrando su interés por las playas mexicanas, en mayor medida las del Caribe y eso generó nuevos bríos al sector turístico.
Para la estimación del ITAT el instituto utiliza, fundamentalmente, la información anual de la Cuenta Satélite del Turismo de México (CSTM), que en su última información del 2019 refirió que el consumo turístico receptivo representó el 16.7%, mientras que el interno el 76.6%, lo que lleva a la conclusión de que el turismo doméstico es el motor de la actividad.
En el caso de los indicadores turísticos, en cifras originales, el PIB Turístico cayó en el cuarto trimestre del 2020 el 26.7%, respecto a igual periodo del 2019, donde el componente de bienes bajó el 23% y el de servicio el 27.5 por ciento.
En tanto, el consumo turístico en el mercado interior se redujo el 27% en comparación anual y su componente interno bajó el 22% y el receptivo el 51 por ciento.
Fuente: EL ECONOMISTA