Herminio Sánchez de la Barquera y Arroyo, decano de Ciencias Sociales de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla, consideró que el gobierno federal se vio rebasado al claudicar ante el Cártel de Sinaloa y haber liberado al hijo de Joaquín «El Chapo» Guzmán, Ovidio Guzmán, lo que desató una serie de enfrentamiento en Culiacán.
En rueda de prensa, Herminio Sánchez calificó lo ocurrido ayer en Culiacán, Sinaloa, como algo histórico ya que en la historia reciente no hay antecedentes de una rendición evidente por parte de las fuerzas del orden ante el crimen organizado, en este caso el Cártel de Sinaloa.
«Evidentemente algo falló. Yo no recuerdo otra ocasión donde se haya visto una claudicación, una rendición de las fuerzas del orden ante la fuerza del crimen, eso es gravísimo. No me refiero a que los narcotraficantes hayan tenido un mayor poder de fuego, sino a que el estado no se atrevió a emplear toda su fuerza para imponerse», consideró.
El académico consideró que el gobierno mexicano tuvo que haber sacado a Ovidio Guzmán de Culiacán y pedir refuerzos para controlar a los grupos armados que por siete horas cometieron una serie de balaceras, motines y enfrentamientos con las fuerzas del orden.
«Es importantísimo que el estado, que tiene el monopolio del uso de la fuerza, tenga la capacidad de usarla cuando sea necesario (…) Creo que lo primero, como en otras ocasiones, hubiera sido sacarlo de ahí, no soltarlo y pedir refuerzos», señaló.
El académico también agregó que es lamentable la respuesta del gobierno mexicano ya que nadie conoce la estrategia de seguridad del presidente Andrés Manuel López Obrador, nadie la ha discutido, y tampoco se puede seguir con la idea de los dichos del mandatario de que esto se trata de ‘abrazos, no balazos’.
«¿Cuál es el proyecto, cuál es la estrategia en materia de seguridad, dónde está, quién la conoce, se ha discutido, vamos a seguir con abrazos no balazos, con fuchi guácala, con acusarlos con su mamá?, Eso no basta, hay cuestiones más de fondo», sentenció. E Consulta