Ricardo Monreal, coordinador de Morena, negó que se recibiría alguna presión del Ejecutivo Federal para que el Senado sesione este lunes con el propósito de aprobar la Ley de Amnistía que el propio presidente Andrés Manuel López Obrador propuso, a fin de evitar contagios de Covid-19 en las cárceles federales del país.
El presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo), mencionó que para la sesión del 20 de abril el único tema de la orden del día, será la aprobación de esta ley y se tomarán todas las medidas sanitarias necesarias para su desarrollo:
Toma de temperatura, sanitización del Salón de Plenos y de otras áreas del Senado, uso de gel antibacterial, cubrebocas y guantes para senadores y personal administrativo.
Dijo también que se dispondrá solo del personal indispensable y en ningún caso se permitirá el acceso a legisladores o personas que estén en condiciones de riesgo por salud o edad, es decir, que tengan hipertensión, diabetes u otra enfermedad, o sean mayores de 65 años. Además, de que se restringirá el acceso a visitantes.
Mencionó también que habrá personal médico a disposición de quien lo necesite y se implementará un protocolo sanitario para la sesión, a fin de evitar en el pleno la congregación de más de 20 personas.
“Desde su despacho, cubículo se estará siguiendo la sesión y, solamente estará la presidenta y un vicepresidente o una vicepresidenta, el secretario o secretaria, sólo tres personas, estará el que presente el dictamen. Hipotéticamente el pleno puede estar solo, con que los senadores estén siguiendo las senadores desde sus cubículos y al momento de la votación igual por escalonamiento. Estas son medidas sanitarias que evitarán cualquier contagio o que ingrese al Senado una persona con síntomas o con posibilidades de contagiar”.
Insistió que esta sesión no responde a la presión del presidente López Obrador para que esta ley se apruebe.
“No tenemos ninguna presión, no tenemos ninguna indicación de nadie, porque e el Senado tiene autonomía. Es una situación de humanidad para los más marginados y para los excluidos y ahora recluidos. (…) Se van a beneficiar los mayores de 65 años, que ya están prácticamente postrados en la celda, ya no se levantan. Lamentablemente, me duele decir, saldrán a sus últimos días, no van a salir a delinquir, por supuesto”.
Sobre la Ley de Amnistía, dijo que esta beneficiará, junto con la preliberación anticipada a un promedio de 8 mil reclusos.
“Pero estamos hablando de un universo de aproximadamente 5 o 6 mil personas. (…) Y por la vía de la preliberación federal le calcula cuando menos unos mil 500, 2 mil personas y por el indulto ahí si no tengo estimación, que es una facultad exclusiva del presidente y ahí no tengo ninguna cifra de algún indulto que le hayan solicitado al presidente de la República”.