Ante los amagos de Estados Unidos de calificar a los cárteles de la droga mexicanos como terroristas, el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard advirtió que México no vería con buenos ojos esa medida y de concretarse debilitará la cooperación bilateral en materia de seguridad y combate al crimen organizado que pueda afectar a ambos países.
“(Esa medida) provocaría que se debilitara la cooperación en materia de seguridad entre ambos países que es la más compleja en todo el mundo (…) espero que coincidan en esto, si Estados Unidos quiere respaldar a México que reduzca el tráfico de armas”, estableció
Informó que esta semana se reunirá con el Fiscal General de Estados Unidos, William Barr para abordar la posible designación de terroristas a los cárteles mexicanos y adelantó que le dejará en claro que el combate al crimen organizado trasnacional es una obligación de corresponsabilidad donde la mejor manera de ayudar a México es no aplicar esa medida anunciada por el presidente Donald Trump que tiene implicaciones en la violación de nuestra soberanía.
Al comparecer ante el pleno del Senado, Ebrard también se refirió a las versiones sobre la intención de Estados Unidos de reabrir el Tratado de Libre Comercio que recién se pactó con ese país y Canadá, para imponer nuevas medidas en materia laboral entre ellas la presencia de inspectores estadounidenses para que verifiquen si las empresas mexicanas cumplen con la legislación laboral establecida en el T-MEC.
NO HAY NADA QUE OCULTAR
En ese sentido, Ebrard aseguró que “no hay nada que ocultar” y sostuvo que cualquier acuerdo que se plantee sobre este acuerdo tendrá que ser sometido al Senado, con lo cual no descartó la posibilidad de que se reabra el T—MEC para introducir nuevas disposiciones.
El canciller detalló que el subsecretario para América del Norte de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), Jesús Seade, uno de los negociadores del T-MEC viajó a Estados Unidos para conocer las propuestas de nuestros socios comerciales en esa materia pero dejó en claro que cualquier planteamiento o eventual agregado al acuerdo comercial tendrá que ser sometido al Ejecutivo federal y sobre todo autorizado o no por el Senado de la República.
“ Cualquier acuerdo tendrá que ser sometido al Senado, (…) no habrá nada que ustedes no conozcan y nos autoricen”, aseveró
Recalcó que “no hay sorpresas” y presumió que nuestra ley laboral es la más avanzada de América Latina incluso que la de Estados Unidos.