Bagdad [REUTERS/ AFP/EFE]. Irán prometió el viernes vengar la muerte del general Qasem Soleimani, el comandante de las fuerzas Quds de élite y arquitecto de la creciente influencia militar de la república islámica en Oriente Medio, quien pereció en un ataque aéreo lanzado por Estados Unidos en Irak.
Qasem Soleimani era considerado como la segunda figura más prominente en Irán después del líder supremo, el ayatolá Ali Jamenei.
El ataque ocurrido durante la madrugada, autorizado por el presidente Donald Trump, representa una dramática escalada en el enfrentamiento en Oriente Medio entre Irán, Estados Unidos y sus aliados, principalmente Israel y Arabia Saudita.
Irán mantiene un prolongado conflicto con Estados Unidos que se agudizó la semana pasada por un ataque a la embajada estadounidense en Irak por parte de milicianos apoyados por la república islámica, ocurrido tras un bombardeo de las fuerzas de Washington a la milicia Kataeb Hezbolá, fundada por Muhandis.
En respuesta al ataque, el primer ministro de Irak dijo que Washington había violado un acuerdo de mantener a las tropas estadounidenses fuera del país. Israel colocó a sus fuerzas militares bajo alerta máxima, mientras que Reino Unido y Francia expresaron su preocupación por el enfrentamiento.
El Pentágono dijo que el “Ejército de Estados Unidos tomó una acción defensiva para proteger al personal estadounidense en el exterior al matar a Qasem Soleimani” y que el operativo fue ordenado por Trump para frustrar futuros planes militares de Irán.