Una vez más la realidad rebasó a la ciencia ficción: la pandemia del SARS-COV-2 sacudió la mentes de los más lúgubres creadores posmodernos, quienes podrían vislumbrar acelerados cambios en el orden mundial de la mano de las Tecnologías de la Información y Comunicación, pero no de un ser invisible que desnudó una vez más la fragilidad de la humanidad.
De este inaudito hecho habla el libro “Crónica de la pandemia (Confinamiento covid-19), del periodista Daniel Cisneros (Edomex, 1982), el cual nos ayudará a comprender cómo ha sido y cómo se desarrolla la pandemia que inició aquel primero de diciembre en un mercado de Wuhan, China, y llegó a México el 27 de febrero de 2020.
Este ejemplar mezcla magistralmente los géneros periodísticos y los vierte en una crónica sobre la pandemia del coronavirus COVID-19, que como indicó el escritor Juan Domingo Argüelles, aborda “el impacto de esta crisis de salud en nuestro país que, a sus centenares de miles de contagios y a sus decenas de miles de fallecidos, ha de sumar también los daños a la economía, a la planta laboral, a la convivencia familiar y, en general, a todos los aspectos de nuestra vida en común”.
La obra, disponible en la página de Ediciones del Ermitaño y librerías Gandhi (aunque pronto también estará en librerías El Sótano, Sanborns y Red de Librerías Independientes), toca fibras sensibles de cómo vive la pandemia y las fallidas decisiones del gobierno de la llamada Cuarta Transformación, que afirmó que le “vino como anillo al dedo”.
La portada de la obra de Cisneros Reyes fue ilustrada por el caricaturista y muralista Jorge Flores Manjarrez, que de manera acertada plasma a la muerte paseándose a lo largo y ancho del territorio nacional.
El libro también habla del desacato de medidas sanitarias: reuniones o fiestas clandestinas organizadas no solo por jóvenes, sino por ciertos funcionarios o hasta por deportistas; crecientes contagios y decesos, inseguridad y saqueos, pérdida de vidas en el mundo cultural y obras inspiradas en la pandemia, sesudas explicaciones académicas y dudosas profecías, tecnología médica y aumento de la virtualización en las relaciones.
Igualmente se menciona el trabajo en casa, las clases a distancia, el desempleo, la migración, la indigencia, la prostitución, el humor como característica de los mexicanos para lidiar con las tragedias, la afectación en los rituales mortuorios tradicionales, el caos en algunos hospitales psiquiátricos, la saturación hospitalaria, la sobredemanda del servicio de incineración, el brote de funerarias clandestinas, la venta de falsas vacunas, el incremento de la pobreza, la vulnerabilidad de los niños y adolescentes, entre otros muchos temas que ayudarán al lector para comprender el momento histórico que le tocó vivir.
Daniel Cisneros se licenció en la UNAM, con mención honorífica, en la carrera de Comunicación y Periodismo. Es colaborador en “Confabulario”, suplemento cultural de El Universal, y profesor de Lengua Materna Español. Fue reportero en La Digna Metáfora y De Largo Aliento, lo mismo que en la sección cultural de El Financiero. Ha colaborado en las revistas Transgresiones, Ibero y Tijuaneo.