Los Órganos Internos de Control son parte del sistema electoral mexicano, por lo que deben ser garantes no sólo del principio de revisión de cuentas, sino de la autonomía e independencia de los órganos constitucionales autónomos, afirmó el Consejero Presidente del Instituto Nacional Electoral (INE), Lorenzo Córdova Vianello.
Al participar en el Encuentro Nacional de Contralores de Institutos Electorales del País, reconoció la importancia de la función que desempeñan los órganos de control, pues de ellos depende el buen estado de salud del Sistema Nacional de Elecciones, de su credibilidad y, en consecuencia, de la democracia.
Por un lado, mencionó Córdova Vianello, los órganos internos de control como vigilantes del buen uso de los recursos que administran las autoridades electorales, deben realizar su función con profesionalismo y exhaustividad; sin embargo, también son garantes de los principios rectores del sistema electoral.
“Si un órgano interno de control o contralor se somete a los intereses de un partido político, fracción política, de una mayoría parlamentaria, legislador o de un grupo de interés, compromete la autonomía del órgano electoral que audita y, en consecuencia, se pone en riesgo la democracia”, advirtió
En la Casa de la Cultura Jurídica, ante el Magistrado Presidente del Tribunal Electoral del estado, Carlos Alberto Puig; de la Presidenta del Instituto Morelense de Procesos Electorales y Participación Ciudadana (IMEPAC), Ana Isabel León Trueba, y de la Secretaria General de la Asociación de Contralores de Institutos Electorales del país, Blanca Aldana Alejandre, el Consejero Presidente del INE agregó que la función de los órganos internos de control, es fundamental en la defensa de la autonomía de la función electoral, frente a los intentos de intromisión de los poderes públicos, privados y de grupos de interés.
“Un órgano interno de control que se ponga al servicio de un órgano del poder entró en una dimensión de la corrupción que tanto ha aquejado al país”, reiteró. “Un órgano interno de control que se preste a ser la punta de lanza a través de la cual se vulnera la autonomía de un órgano constitucional autónomo, como somos los electorales, está contribuyendo a socavar el principio democrático que se centra en la vigencia del principio de imparcialidad y de la independencia que deben tener los órganos electorales respecto de los actores políticos”.
En suma, expuso, los órganos internos de control son parte integrante de los órganos electores y, consecuentemente, responsables de la vigencia de los principios del orden democrático.
Todos somos responsables de cuidar la democracia
En este marco, el Presidente del INE dictó la conferencia “Reformas Electorales Constitucionales que se discuten en el Congreso de la Unión”, en la que hizo un recuento de 40 años de reformas y cambio político.
“La democracia mexicana es resultado de muchas generaciones”, afirmó.
Explicó que hasta el momento se han presentado más de 115 reformas electorales y sólo una es integral e implica la revisión radical del sistema electoral, pero ninguna se ha planteado el propósito de eficientarlo, mejorar la certeza de los procesos electorales o las condiciones de la competencia
“Todos somos responsables de cuidar y preservar el sistema electoral”, dijo.
Subrayó que hasta el momento las reglas electorales han funcionado bien y, en todo caso, es necesario que cualquier cambio cuente con un consenso amplio de todas las fuerzas políticas y no pierda de vista los cuatro pilares del sistema electoral: la autonomía de las autoridades electorales, los procedimientos que dan certeza a las elecciones, las reglas de equidad en las condiciones de la competencia y la posibilidad de mantener la representación de la pluralidad política.
“Podemos mejorar el sistema, hacer cambios, analizar ahorros, pero si no hay reforma, no pasa nada”, puntualizó ante contraloras y contralores de todo el país.