Una de las consecuencias, en el plano financiero, de la pandemia de COVID-19 en México se reflejará en el manejo de las Afores, y por supuesto en las pensiones, cuyo escenario de acuerdo al ciudadano presidente comenzará a atenderse en el corto plazo.
Al respecto, existen múltiples versiones entre ellas la que señala que el gobierno del ciudadano presidente echará mano de esos recursos para enfrentar la depresión económica que se avecina, en lo inmediato.
Y como consecuencia de ello, las Afores, podrían enfrentar un desfalco, que se vería reflejado en menores ingresos para quienes reciban en el futuro su pensión vía el ahorro realizado en esos fondos.
En torno a ello, el ciudadano presidente apuntó que se revisará en lo inmediato lo que se puede hacer en el caso de la Afores y el manejo de las pensiones, también se quiere buscar la forma de que se pueda reponer la merma generada por el cambio en la ley.
Resaltó que, aunque el asunto de las Afores no afectará a su gobierno, quiere dejarlo resuelto hacia el futuro, porque se quiere garantizar mejores pensiones a los trabajadores.
Las palabras se las lleva el viento, y por lo pronto de entrada las empresas involucradas en el manejo de las Afores, tienen ante sí el gran reto de atender las necesidades de sus asociados y en la medida de lo posible explicar las consecuencias que tendrá en su rendimiento la depresión económica mundial. Y cuál puede ser su futuro.
En tanto que el gobierno del ciudadano presidente deberá enfrentar el panorama de la mejor manera posible, para deslindarse en la medida de lo posible de toda serie de señalamientos.
Por lo pronto los recursos están ahí, al igual que la tentación de echar mano de ellos.
Independencia
Las decisiones soberanas de cada estado son hoy más que evidentes, ante el próximo fin de la Jornada Nacional de Sana Distancia.
No son pocos los mandatarios estatales que han decidido no apegarse a pie juntillas a las directrices marcadas desde Palacio Nacional y con ello ponen distancia de la guía del ciudadano presidente.
Y en este escenario, sin duda, la más afectada será la colectividad que no atinará a quien hacer caso, sobre todo quienes habitan en los denominados por el ciudadano presidente como “municipios de la esperanza” y que, por determinación de algunos gobernadores, no podrán retomar sus actividades cotidianas, a pesar de tener el aval de la Federación.
En este plano la falta de coordinación entre los tres niveles de gobierno, es lesiva para la ciudadanía, al tiempo que se aprecia la falta de un verdadero estadista que guie el derrotero nacional.