Por Alejandro Villegas…
El ciudadano presidente trata de mostrarse indiferente ante la conformación de la coalición PRI, PAN y PRD. Pero, en el fondo, se aprecia su temor.
Sabe que los candidatos comunes que postularán en 180 de los 300 distritos electorales podrían ser la fórmula para terminar con la mayoría morenista en la Cámara de Diputados.
Por esa vía, la oposición tratará de ejercer la figura de cogobierno, al igual que lo hizo el PRI durante la era panista y, en 1997, el PRD con Porfirio Muñoz Ledo a la cabeza, en lo que fue una pequeña gran minoría que ejerció presión sobre el desempeño del presidente Ernesto Zedillo, al grado que señaló que el Ejecutivo propone y el Legislativo dispone.
El panorama electoral comenzó a tomar forma. Y lo más interesante es que el tan anhelado bloque opositor que tanto soñó construir Andrés Manuel López Obrador, durante tantos años, hoy empieza a materializarse, pero en su contra.
Al igual claro que la relación PRI-PAN que tanto denunció.
La oposición de apresta a dar la batalla al partido en el poder, bajo la consigna de Va por México.
Vacuna
Por fin llegó la vacuna contra el COVID-19, el ciudadano presidente podrá pavonearse como el gran vencedor, aunque su logro sea mínimo ante el tamaño de la población.
Desde el pulpito presidencial no cesarán los pregones, en busca del aplauso del respetable.
Sólo falta que el ciudadano presidente asegure que es el regalo de Navidad para el pueblo bueno, aunque a lo mejor en una de esas se atreve.