Por Alejandro Villegas…
El ciudadano presidente se fue con todo, en contra de los consejeros del INE que echaron abajo diversas candidaturas de Morena, entre ellas la de Félix Salgado Macedonio. Y con ello, sepultó el acuerdo por la democracia que, por cierto, no fue suscrito por el INE.
Fiel a su estilo histriónico, se victimizó y calificó la acción de los consejeros del INE de un atentado contra la democracia, al tiempo que trató de endosar culpas a delincuentes de cuello blanco y el supremo poder conservador.
En la escena sólo faltó que el ciudadano presidente se rasgara las vestiduras y, en una de esas ocurrencias que suele, pidiera a las señoras madres de los consejeros electorales que hablaran con sus hijos.
El evidente descontento del ciudadano presidente, permite apreciar de nueva cuenta a plenitud que su concepción de gobierno, pasa de manera obligada por el sometimiento total de todos los actores políticos, económicos y sociales, a su voluntad.
Olvida que organismos como el INE gozan de autonomía y que existen instancias para que los afectados, en su caso, promueven las inconformidades que consideren necesarios.
Además, que trata de asumir un papel protagónico, en el plano electoral, que no le corresponde.
A todas luces, el ciudadano presidente tiene pleito cazado con los consejeros del INE y no dejará de presionarlos, hasta que se sometan a su voluntad.
Lo malo para él es que una parte sustancial de la sociedad, no comparte su concepción de democracia, así como la visión del escenario en el que se debe desarrollar la contienda electoral.
Retorno a clases
El retorno a clases presenciales, en las próximas semanas representa un reto para la sociedad más que para las autoridades, en principio porque una de las condiciones que se han establecido es que esa acción sea voluntaria, con lo que los funcionarios involucrados, incluido por supuesto, el ciudadano presidente se estaría lavando las manos ante cualquier posible consecuencia.
No cabe duda que el ciudadano presidente está urgido de demostrar avances evidentes en el control de la pandemia, pero el retorno a clases presenciales, no es la mejor opción.