Por Alejando Villegas..
El ciudadano presidente trata de mantener distancia de la arena político electoral, pero no puede hacerlo. Insiste en las comparaciones con el pasado y afirma que existe un clima de tranquilidad para la jornada comicial que contrasta con el número de candidatos asesinados y amenazados.
Pretende ignorar que no todo está bien, como puede contrastarse con un simple recuento por ejemplo de lo que sucede en Aguililla, en donde simple y sencillamente no existe un clima electoral.
Las candidatas y los candidatos asesinados, son algo más que una estadística. Sus deudos y simpatizantes pueden dar cuenta de ello. Esos crímenes evidentemente tienen un efecto inocultable, tanto en sus familias, como en las comunidades en las que se registraron.
El ambiente de tensión es focalizado, pero existe. El país, no está en llamas, pero tampoco vive una paz armiosa.
Se trata de una realidad que no puede ocultarse con el discurso.
A lo largo del domingo, como ciudadanos daremos cuenta de lo que sucederá, a lo largo y ancho del país.
Sin duda, las redes sociales serán determinantes, para la difusión de anomalías, que dejarán mal parado el discurso de tranquilidad que hoy sostiene el ciudadano presidente.
Agenda
Pasada la jornada electoral, independiente de sus resultados, el principal anhelo de la colectividad, sin duda, será que las clases política y gobernante se decidan por fin a atender la agenda social.
Los pendientes en rubros como la seguridad, empleo, reactivación económica y educación, están ahí, a la espera de ser atendidos.