Por Alex Villegas..
No hay medias tintas. O se está por la transformación del país o en contra de ella. Somos liberales o conservadores, con esos señalamientos, el ciudadano presidente mostró su determinación de dividir al país.
Lejos de pugnar por la unión nacional, el ciudadano presidente apuesta por la división o el sometimiento a ultranza.
En paralelo, también evidenció su urgencia de apoyo social, en medio de la crisis por la pandemia de COVID-19 que se niega a aceptar de manera abierta.
Así, lejos de pugnar por la unidad nacional, a favor del desarrollo y recuperación del país, el ciudadano presidente arroja gasolina al fuego.
El ciudadano presidente quiere una nación plegada a sus deseos, sin capacidad de cuestionamiento o discrepancia alguna, esa no es una posición lógica de quien se dice demócrata o un estadista de altura.
Paradojas
En medio del semáforo rojo por COVID_19, el ciudadano presidente realizó una gira que bien pudo haber esperado, mejores condiciones, para no proyectar un mensaje que incitara a la población a salir de sus casas.
Machetazo a caballo de espadas, así parece el anuncio emitido por el ciudadano director general del IMSS, Zoe Robledo, de que contrajo COVID-19 pero seguirá al frente de sus responsabilidades.
Aún no salimos del episodio uno de la pandemia, cuando el ciudadano subsecretario López Gatell ya anticipa que en el corto plazo podría presentarse un rebrote de COVID-19.
No que no se iba a contraer deuda. Al menos en el caso de lo que se negoció con el Banco Mundial, el ciudadano presidente y su ciudadano secretario de Hacienda deben una explicación a fondo. El tema no se puede superar con una declaración simplona que busque darle vuelta a la página. Si el préstamo ya estaba contemplado, como argumentó el ciudadano presidente, hay que explicarlo con claridad. Los recursos son más que necesarios, pero había un compromiso. No mentir.