Por Alejandro Villegas…
El ciudadano presidente se mostró complacido por el arribo a México del general Salvador Cienfuegos. Tiene en sus manos un caso más que puede explotar en términos mediáticos, al comprometer que se actuará en consecuencia, llegado el caso.
Asegura al pueblo bueno que se impartirá justicia en el caso del general Cienfuegos, pero lo hace de manera cautelosa.
El ciudadano fiscal Gertz Manero, en consecuencia, tiene un compromiso serio por delante, y quien se lleva se lleva las palmas por su gestión diplomática es el ciudadano canciller.
Sin embargo, una primera lectura de los hechos, permite apreciar que el trato que se brindó, en territorio nacional, al general Cienfuegos se traduce en una expresión de respeto a las fuerzas armadas por parte del gobierno del ciudadano presidente.
El hecho de que se haya dejado en libertad al presunto culpable, en principio más allá del respeto al debido proceso, debe leerse como debilidad en las pruebas, en particular y en general, del expediente proporcionado por la justicia estadounidense.
No obstante, el caso del general Cienfuegos, sin duda será explotado al máximo por el ciudadano presidente para enarbolar su bandera de combate al pasado y la corrupción, al tiempo que si algo sale mal y el indiciado es exonerado, siempre podrá argumentar que como lo prometió se aplicó justicia.
A fin de cuentas, lo importante es cuidar la imagen y tratar de conservar, a toda costa el respaldo del pueblo bueno.
Marihuana
La legalización del consumo de la marihuana con fines lúdicos y medicinales avanza en el Legislativo.
Y con ello, sin duda, se dará un golpe indirecto a quienes aún trafican con marihuana.
La oportunidad de que se cultive y consuma libremente, será una ventana de oportunidad no solo para laboratorios y comercios, sino para muchos emprendedores.
Todo está listo para que se expida la Ley Federal para la Regulación del Cannabis, además de que se reformen y adicionen diversas disposiciones de la Ley General de Salud y del Código Penal Federal.
La gran duda, en esta etapa, es si verdaderamente la colectividad está lista para evitar que de la libertad se pase al libertinaje, al tiempo que las clases política y gobernante deben establecer con claridad si en el futuro mediato, no hay posibilidad de que se legalice el consumo de otras drogas en el país.