Por Alex Villegas…
En la conmemoración del primer aniversario del inicio de su gestión, el ciudadano presidente va por la confirmación del respaldo popular.
Más que baño de pueblo o interlocución con la ciudadanía, el ciudadano presidente pulsará el respaldo social a su desempeño.
En lo que, de acuerdo a su cuenta particular, será su cuarto informe al pueblo bueno, el ciudadano presidente ampliará el recuento de los daños y los logros, registrados en el primer año de su mandato.
Obviamente en el discurso inclinará la balanza a su favor, para proyectar la imagen de una 4T que se traduce en un golpe de timón, que se refleja en el combate a la corrupción, una redistribución del gasto público para enfocarlo en programas sociales y la aplicación a raja tabla de la austeridad republicana hasta transformarla en pobreza franciscana, entre otros campos de relevancia para el gobierno en turno.
Los aspectos negativos en materia de seguridad, salud, economía y empleo, serán opacados por el discurso triunfalista del ciudadano presidente, que se traducirá en algo más que un monólogo narcisista.
TMEC
Todo indica que el año concluirá sin que se apruebe, en Estados Unidos, el nuevo tratado trilateral, a pesar del respetuoso llamado del ciudadano presidente para que los legisladores estadounidenses saquen adelante el proceso.
En tanto, el TLC y sus reglas se mantienen vigentes, pero a un año de su suscripción formal, queda más que claro que por muy buena relación que aparentemente exista con la administración Trump, el ciudadano presidente y sus colaboradores en ese campo, no han podido completar la faena
