Por Alex Villegas..
Con el arribo, en calidad de preso, de Emilio Lozoya a México, el ciudadano presidente comenzará a enfrentar la realidad en torno a su proceso.
El combate a la corrupción tendrá una nueva oportunidad de ser expuesto y brindarle jugosos dividendos.
Se espera que las declaraciones de Lozoya clarifiquen las especuliaciones en torno al financiamiento de la campaña de Enrique Peña Nieto, Obedrecht y Agronitrogenados, entre otros temas.
Pero no hay nada seguro. Lo más probable es que lo declarado por Lozoya termine por convertirse en un gran distractor y que los peces gordos que espera la ciudadania, sean capturados, terminen por convertirse es escuálidos peces.
Como sea Lozoya llega enfermo y de entrada aunque preso no la pasara nada mal.
Y el ciudadano presidente buscará enarbolar en todo lo alto los resultados de un triunfo raquitico.
Semáforo
Tras la superación de los escollos y bajo coordinación vuelve a operar el semáforo epidemiológico en una acción que se antoja necesaria y más que prudente.