Esta es, probablemente, la primera vez que un fenómeno de la naturaleza trastoca tan profundamente la forma de vivir de toda la humanidad en forma simultánea. Y este impacto no es solo sobre cómo nos relacionamos, trasportamos o trabajamos. Es también un gran golpe a la economía mundial, en dimensiones nunca antes vistas.
Sabemos que vamos a superar esta crisis y, aunque nuestras costumbres tal vez nunca volverán a ser las mismas y la economía demore más tiempo en recuperarse, vamos a salir adelante.
Sin embargo, esta experiencia debe hacernos reflexionar sobre el próximo fenómeno de la naturaleza – en este caso provocado por nosotros mismos – que nos va a golpear con mucha más fuerza que el Covid-19: el cambio climático. Los científicos de todo el mundo llevan años alertándonos sobre los impactos que este tendrá sobre los ecosistemas, estilo de vida y economía y, honestamente, creo que no lo hemos tomado muy en serio.
Tomemos esto como una oportunidad para ver el futuro con más responsabilidad y pensar en cómo queremos volver a vivir, movernos y producir una vez que la crisis actual termine. Se ha demostrado que gracias al desarrollo tecnológico, sostenibilidad y economía van de la mano.
Es por esto que invitamos a todos, personas, asociaciones y empresas a tomarse en serio el compromiso con la sostenibilidad.